Si pensabas que los grandes platos son exclusivos de los grandes chefs, te equivocabas. Y hoy te lo demostramos enseñándote cómo preparar cordero o cochinillo, aunque lo tuyo no sea la cocina.
Para eso, debemos irnos a una de nuestras categorías favoritas de la tienda online de Disraval (la encontrarás en este enlace).
Una categoría compuesta por exquisitos platos ya elaborados, guisados y listos para el consumo. ¿Tu única misión? Seguir los sencillos pasos que te contamos en este post.
Eso sí.
Antes de coger el bolígrafo, intenta decidir si prefieres un cuarto de cordero o de cochinillo. Ambos lechales, confitados a baja temperatura e increíblemente fáciles de preparar.
Y lo más importante: ambos son una puesta segura para las comidas familiares que traerá consigo diciembre y sus fiestas. ¡Enamorarán a todos!
Cómo preparar el cordero lechal de Disraval
¿Te has decidido por el cordero? ¡Genial! No te arrepentirás de escoger al mejor compañero de las ocasiones especiales. Este es perfecto para dos o tres comensales, así que asegúrate de pedir un par si sois familia numerosa.
No hemos empezado a explicarte cómo prepararlo y ya se nos hace la boca agua…
- Retira toda la grase y la gelatina que recubre la pieza. Que, por cierto, se nos olvidaba: viene directa de las zonas de Valladolid/Salamanca.
- Precalienta el horno a 190ºC.
- Coloca la pieza con la piel hacia arriba en una bandeja de horno, rociando el jugo (previamente calentado) por encima.
- Hornea hasta que la piel se dore; aproximadamente unos 25 minutos. Sí, como lees, ¡rapidísimo!
- Por último, prueba a combinarlo con unas ricas patatas panaderas y tu vino preferido. Será el plato estrella de la Navidad.
Cómo preparar el cochinillo lechal de Disraval
¿Eres un amante del cochinillo? ¡Muy inteligente por tu parte! Ve abriendo una botella de tinto y prepárate para probar un manjar proveniente de Segovia, perfecto para comidas con dos o tres comensales.
Ahora mismo nos das mucha envidia (de la sana).
- Retira toda la grasa y gelatina de la pieza, mientras precalientas el horno a 220ºC.
- Coloca la pieza a media altura en el horno, en una rejilla y con la piel hacia afuera. Importante: no olvides poner una bandeja de horno debajo, para que recoja la grasita que nos servirá posteriormente.
- Hornea durante 50 o 60 minutos, y la piel irá adquiriendo un sabroso tono dorado. ¿Qué tal si vas comprobando con un tenedor que esté crujiente?
- Vierte la grasita (antes mencionada) alrededor del cochinillo y, por último, acompaña con unas rebanadas de pan rústico. ¡Riquísimo!
Al igual que su compañero, se trata de un producto apto para celíacos.
¿Estás preparado para convertirte en el chef oficial de la familia? ¡Cuéntanos el resultado!
0 comentarios